En el idílico paisaje costero de Ensenada, donde el cielo se une con el mar en un horizonte infinito y la brisa salada invita a la tranquilidad, se alza una preocupación que empaña la belleza natural de nuestras playas. Los últimos informes de la Zona Federal Marítimo Terrestre (Zofemat) han expuesto una realidad desalentadora: la persistente falta de responsabilidad de los ciudadanos, tanto locales como visitantes, que han convertido nuestras costas en un vertedero de basura a cielo abierto.

Ante esta problemática, el alcalde Carlos Ibarra Aguiar ha levantado la voz en un llamado urgente a la acción. A pesar de la disponibilidad de contenedores de basura estratégicamente ubicados en cada playa, lamenta profundamente la actitud irresponsable de aquellos que eligen dejar sus residuos esparcidos en la arena, en lugar de depositarlos adecuadamente en los lugares designados.

El reciente fin de semana de Semana Santa, una época de gran afluencia turística en nuestras costas, ha evidenciado una vez más la gravedad del problema. Aunque las condiciones climáticas adversas ayudaron a reducir la acumulación de desechos en comparación con años anteriores, la cifra de 10 toneladas de basura recolectada es un recordatorio contundente de la urgencia de la situación.

Según los datos proporcionados por Zofemat, durante el mes de marzo se recolectaron un total de 70 toneladas de basura en las playas locales. De estas, 10 toneladas correspondieron al mencionado fin de semana festivo. Estas cifras son alarmantes y reflejan la necesidad apremiante de tomar medidas para abordar este problema.

El equipo de limpieza de Zofemat, compuesto por individuos comprometidos con la preservación de nuestro entorno natural, trabaja incansablemente día tras día para mantener nuestras playas limpias y seguras. Su labor abarca desde la recolección y disposición adecuada de los residuos hasta el cuidado de la vida marina que habita en nuestras costas.

Sin embargo, la solución a este problema no puede recaer únicamente en los hombros de las autoridades y los equipos de limpieza. Es imprescindible que cada ciudadano de Ensenada asuma su responsabilidad individual y se comprometa activamente a cuidar y preservar nuestras playas. Solo a través de un esfuerzo conjunto y consciente de toda la comunidad, podemos garantizar un futuro próspero y limpio para nuestras costas y para las generaciones venideras. Juntos, podemos restaurar el esplendor natural que define a nuestro amado hogar costero.

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